Un regalo diferente para runners

Sólo llevo siete meses corriendo pero doy tanto la brasa que ya todo mi entorno oye la palabra runner y se acuerda de mí. Y si no mirad esto... :)

Resulta que el otro día cené en el Yakitoro con mis amigas Jimena y Lana, y como somos más majas que las pesetas, allí mismo nos hicimos unos regalos tontunos vacacionales de esos que cuestan muy poco pero están elegidos con mucho gusto. Gustazo, es lo que tenemos, pero bueno, que eso ya lo sabéis y me estoy yendo del tema... :P

El caso es que Lana me trajo una caja de Ucrania preciosa en la que todavía no sé qué pondré, tal vez anillos... no sé, pero es preciosa (algunos ya la visteis porque la enseñé el otro día en Instagram).

Y Jimena, lo que nos trajo, venía de Alemania. 

Primero vi el regalo de Lana... 

¡Un paquete de pasta con forma de stilettos! Jajaja, ¿imagináis qué maravilla?

Cuando llegó mi turno descubrí que el mío iba por otros derroteros pero era igual de chulísimo...

¿Cómo, que no sabéis alemán? ¡Pues a qué estáis esperando! :P

¡Runners, son runners! Mi pasta era con forma de corredores y casi me meo de la risa de que me hubiesen traído algo tan sensacional. Que la pasta de tacones también me gustaba ehhh, y mucho, eso es verdad, pero no me digáis que con ésta en Instagram voy a ser lo más de lo más. Jajajajajajaja.